Taramundi, cuna del turismo rural

Asturias es sinónimo de turismo rural. Basta con una simple vuelta por cualquier aldea para pasear entre hogares de antaño reconvertidos hoy en casas con encanto. Y hasta, Taramundi, cuna del turismo rural en España y por extensión en Asturias se fue el Club de Viajes de La Hermandad de Empleados de Cajastur en busca de la esencia y riqueza de la vida rural en la región.

Bien temprano, antes que el sol diera los buenos días, el Club de Viajes se puso en ruta hacia el occidente de Asturias. Por delante, más de 300 kilómetros de grandes paisajes, fusión de montaña y mar en una única postal.

Desayuno de rigor en Otur y alrededor de las once de la mañana, el Club de Viajes de Cajastur desembarcó en Taramundi, para iniciar un magnífico paseo por los conjuntos etnográficos de Os Teixois, Mazonovo y Esquios.

Os Teixois es una pequeña aldea situada a unos cuatro kilómetros de Taramundi y emplazada junto a un pequeño río. El conjunto etnográfico cuenta con una colección de inventos capaces de garantizar la autosuficiencia de las gentes que vivían en la aldea. Así, Os Teixois cuenta con mazo, molino, batán, piedra de afilar, fragua y hasta una pequeña central eléctrica que lo alimenta. Elementos que ahora nos suenan remotos pero que antes eran el modo de subsistencia de paisanos y paisanas apegados a la tierra.

Por su parte, Mazonovo aglutina la mayor exposición de molinos por metro cuadrado de España. El museo de los molinos está situado entre dos ríos en un paraje de singular belleza del occidente asturiano y ha sido recuperado con la intención de conservarlos y dar a conocer al público las herramientas y máquinas utilizadas por los lugareños para moler los cereales. A dichos molinos hay que sumar una central eléctrica que gracias a la fuerza hidráulica proporciona luz a todo el conjunto.

Y tras los ingenios mecánicos a los ingenios del hombre: el temple del metal para dar forma a las famosas navajas de Taramundi. En esta ocasión, en el Caserío de Esquios, una pequeña aldea situada a dos kilómetros de la villa de Taramundi y habitada por “ferreiros”, que muestran su buen hacer y dominio del oficio a todo aquel que se deja caer por su tierras, deseoso de conocer su cultura y su gente.

Tras el paseo matutino, comida de hermandad de los miembros del Club de Viajes. Buenas viandas y mejor conversación en el restaurante Casa Paulino, ubicado en pleno centro de Taramundi.

Con la fuerzas ya recuperadas y después de una breve visita a La Rectoral de Taramundi, de nuevo al autobús con destino a Puerto de Vega, uno de los pueblos más pintorescos de la Costa Cantábrica y que cuenta en su currículum con las distinciones Pueblo Ejemplar de Asturias 1995 y Pueblo más guapo de Asturias 1998.

Sin embargo, el destino quiso que el Club de Viajes dejara para otra ocasión la visita a Puerto de Vega. Un pequeño contratiempo obligó a modificar la ruta inicial y dejar la expedición para otra ocasión. Ya lo dice el refrán, al mal tiempo buena cara y otro pueblo para visitar en el futuro. Será por días...